Por: Sandra Liliana
Cardiopatías
Hola mi nombre es Iliana.
Llegué a este mundo con 2 padres jóvenes y muy sanos. Sin embargo yo tenía mi corazón al revés, la orta y los ventrículos totalmente al revés.
Los doctores dicen que es un caso entre miles, pero así nací. Mis padres, me dieron todo lo que pudieron y a los tres meses, salí de un cateterismo, sonriendo con quien me hacía fiestas aunque después ya no me sentía también.
A los cuatro, cinco y seis meses entraba y salía del hospital una y otra vez. Mi primer diente, me salió estando en terapia intensiva, y mis papás, solo me podían visitar cada seis horas, pero siempre me ponían música sin que los doctores se dieran cuenta.
Una de las veces que salí del hospital, disfruté mucho de mi familia, me daban papillas, chocolates, y nos escapábamos con mis abuelitos. También, me ponían películas y mi mamá, platicaba mucho. El momento más feliz, era cuando mi papá llegaba de trabajar con su cara cansada, pero con una sonrisa enorme que me hacía muy feliz.
En una de la operaciones por las que pasé, me hicieron un hoyito en la garganta, por eso no pude hablar, sin embargo, aprendí a expresar todo a través de la mirada.
Luché demasiado por nueve meses, pero al final, estaba muy cansada. Mis papás, entendieron mi cansancio y con muchas lágrimas en los ojos, me dejaron ir.
Yo no sólo agradezco la oportunidad de conocer a dos padres, sino de haber tenido dos padres buenos, en un millón.
***Historia compartida por Sandra, madre de la pequeña Iliana. Q.E.D.